Miniatura Amigo Invisible 2021. "¡No puedes pasar...!"

 Una vez más, con las Navidades a la vuelta de la esquina, llega el momento de enseñar la miniatura del Amigo invisible de la edición 2021. Como viene siendo habitual en los últimos años, ésta es la cuarta vez que participo en esta iniciativa tan bonita, nos juntamos un grupo de amigos y hacemos una especie de "Amigo invisible".

Los requisitos son muy sencillos, buscar una miniatura que creas que le puede gustar a la persona que te ha tocado y poner todo tu cariño y pericia en ella. No hace falta ser un virtuoso de los pinceles, simplemente echarle un poco de ganas y tener algo pintado por un buen amigo en tus vitrinas.

En esta ocasión, me tocó a Gorgoroth como amigo invisible. Como era consciente que es una persona a la que le gusta Mordheim y El Señor de los anillos, una idea comenzó a rondarme por la cabeza, recordé la vieja miniatura de Nicodemus, un mago de Mordheim que tenía un cierto aire que nos podía recordar a algún personaje literario..., coff, coff, Gandalf, coff, coff... Así que después de mucho rebuscar y revolver, pude encontrar la miniatura arrumbada en una vieja caja.

A la hora de ponerme manos a la obra, lo primero que pensé fue en cómo pintarla, para ello, lo primero que me vino a la memoria, es la ilustración de una portada El Hobbit ilustrado que editó Norma Editorial hará la friolera de 20 años en tres tomos sueltos, ilustrado por David Wenzel, una auténtica obra de arte.

Así que supe, que además del gris, el azul iba a formar una parte importante de mi paleta de colores.

Con la miniatura ya pintada, me planteé como basear la miniatura, ¿una simple base de 25 mm con adoquines?, como si anduviese por las calles de Mordheim, nahhhh, demasiado soso. ¿Tal vez una base más grande, andando entre ruinas de la ciudad maldita?, esa opción la descarté enseguida, no me veía con la soltura suficiente para que ese elemento de escenografía me quedara bien. Así que finalmente me decidí por darle un toque más Tierras ásperas, representando uno de los muchos vagabundeos de Gandalf, un encuentro fortuito con alguno de los esbirros de la Sombra a los pies de unas decrépitas ruinas.

Para representar esas ruinas, tiré de unas piezas de resina que tenía de la marca Scibor guardadas desde hace mucho.

He aquí la explicación del por qué he elegido esa miniatura y la forma de trabajarla, sólo queda, que mi amigo invisble la disfrute tanto como yo lo he hecho en su creación.

Buena caza y largas lunas.