He de reconocer que la “parte histórica” de este hobby, la he tenido bastante descuidada. Por una parte, los principales intentos que he hecho de entrar en ella, ha sido a través de las Guerras Napoleónicas, en diversas escalas: 6, 18 y 25 mm. Pero la disparidad de reglamentos, la complejidad de verse sujeto a una uniformidad a la hora de pintar, en función de las diversas campañas, los cambios de uniformes, según los años, el volumen de minis a pintar, etc…, acabaron por desanimarme, cada vez que quería iniciar un proyecto. Si a eso añadimos que debido al Brexit, conseguir minis históricas desde UK, donde residen muchas de esas marcas, se hace un poco más complicado, terminé por arrojar la toalla.
Entonces, en el verano de 2021, escuché hablar de una marca española, Baraka Games, que iba a comenzar a comercializar desde cero una gama de miniaturas, de La Guerra del Rif, con miniaturas de 28mm en metal.
Estuve indagando en la marca, el proyecto y viendo las primeras referencias que sacaban. Este periodo, es uno de los menos conocidos a nivel general en nuestro país. Solapado entre la pérdida de las últimas grandes posesiones coloniales de ultramar: Cuba y Filipinas, y el estallido de la Guerra Civil Española.
Con el afán de echar una mano en la andadura de la marca, pillé varios Blister de infantería española, en concreto de legionarios, que aún no he comenzado a pintar. Pero hace unos meses, sacaron unas referencias de caballería rifeña, que me enamoraron por la calidad de las minis, especialmente la de los caballos. Sinceramente, puedo decir, que creo que son las mejores monturas que he visto esculpidas en 28 mm. Os dejo un detalle de cómo venían en el blister, el casteado, me parece muy bueno y os puedo asegurar que he puesto la minis de los caballos, tal cómo me llegaron, sin quitar rebabas o líneas de molde.
En vez de resistirme, decidí darme el capricho de coger cada una de las referencias de caballería rifeña que hay actualmente en la gama:
Mando a caballo: 3 jinetes con montura.
Caballería 1: 3 jinetes con montura.
Caballería 2: 3 jinetes con montura.
Guardacaballo: 1 Jinete desmontado con 2 caballos.
Jinetes a pie: Los 6 jinetes de los Blister de caballería 1 y 2, escaramuceando a pie.
Reconozco que no soy imparcial con estas miniaturas, me gustaron mucho y cuando compré las minis, quedé gratamente satisfecho al tenerlas en mano. El hecho de que las 11 monturas sean diferentes, cada una con uno de los diferentes movimientos de un caballo en su evolución del paso al galope, me ganó. Que los jinetes de los blister 1 y 2, sean los mismos que aparecen escaramuceando con rifle, es seguramente una tontería, pero son esos pequeños detalles, que denotan el mimo puesto en esta gama de miniaturas. Sé que a nivel reglamento tiene sentido usar el guardacaballo, pues los jinetes, pueden desmontar para escaramucear. La miniatura representa a uno de los hombres, que se queda atrás, sujetando las riendas de las monturas, para que no salgan huyendo.
Aunque hay un reglamento de descarga libre en la página de la marca, he de reconocer, que aún no he jugado ninguna partida. He visto algunos informes, hablado con gente que lo ha jugado, etc… y me gustaría probarlo en un futuro.
Si alguien siente curiosidad, por daros una pinceladas muy breves, os puedo comentar que se trata de un juego de escaramuzas, En él puedes combinar infantería, caballería y artillería. Prima el uso de unidades de infantería, con sus apoyos de caballería y artillería, (recientemente la marca ha añadido una pieza de artillería Schneider 75 mm a su catálogo, así como un tanque Renault FT 17). Si queréis profundizar de verdad en el juego, o las miniaturas, os recomiendo que le echéis un ojo a su web. Os dejo foto de esos últimos Blister, que están sacados de su página web.
En mi caso, he decidido comenzar este proyecto, con una referencia modesta, el guardacaballo rifeño, compuesto por una rifeño que sujeta dos monturas por las riendas. Quería que sirviera para tomarle el pulso a estas miniaturas, especialmente para ver cómo me sentía pintando los caballos. ¿Por qué elegí empezar por los rifeños en vez de los legionarios que tengo pendientes de pintar?, pues no os voy a mentir, el color del uniforme legionario, es un tanto peculiar y a veces difícil de conseguir, más cuando tienes que pintar un puñado de mimis. Así que para no comenzar el proyecto frustándome, quise hacerlo con la caballería rifeña, ya que a la hora de pintarlos, tengo mucha libertad creativa, al no llevar uniforme.
De hecho en este Blister, lo más “problemático” para mí ha sido pintar el rifeño que sujeta los caballos. He querido huir de tonos marrones, ocres, etc…, para pintar toda la miniatura.
Quería darle importancia al jinete, por eso quise introducir notas de color en la chilaba. Mi intención es trabajar las diferentes chilabas, para dotar a cada mini de personalidad. Por supuesto algunas serán de tonos más apagados o monocromas, pero no quiero dejar pasar la oportunidad, de trabajar esas prendas tan vistosas. Por cierto, la miniatura viene con varias opciones de montaje, para el brazo izquierdo, puede sujetar un rifle, una cimitarra o simplemente no portar nada.
Los caballos quise pintarlos en tonos diferentes, para que cada uno de ellos destacara independientemente del otro, reforzando el carácter de caballería irregular. El trabajo con los cubremantas y los flecos, fue una de las partes más divertidas del proceso. Al igual que dejarse llevar con los arreos de los animales, huyendo de los típicos tonos cuero. Trataba de reseñar que para los jinetes, las monturas eran su orgullo y por eso los enjaezaban con sus mejores galas.
Respecto al tono del pelaje de los caballos, me decanté por un alazán, marrón oscuro y un palomino o caballo tostado. Quería probar diferentes tonos, para ver cómo de cómodo me sentía trabajando cada uno de ellos. Las sensaciones fueron muy buenas y realmente conseguí unos resultados finales que me dejaron muy buen sabor de boca.
El casteado de las minis es una delicia, la musculatura de las monturas te indica claramente dónde aplicar sombras, luces, etc…, por lo que son muy agradecidas de pintar.
Por último, tuve que preparar la peana, aunque se trata de una peana de tamaño nada desdeñable, 60 mm, el espacio va justito, aún así, se puede crear una pequeña viñeta. En mi caso opté por representar una zona semidesértica. Me decanté por usar un producto de MIG, para representar la textura del terreno que buscaba, en concreto, “Dry Earth Ground”.
Tuve que repartir el producto con mucho cuidado, para no estropear el trabajo previo de pintura. Antes de que secara el producto, coloqué un par de piedras, para romper la monotonía de la peana. Cuando la base estuvo seca, pinté las piedras en tonos grisáceos y apliqué pincel seco, para darle un tono acorde con el del resto de la base. A continuación, me dediqué a aplicar una serie de pinceles secos:
1- Amarillo Desierto. Vallejo (977).
2- Arena Iraquí. Vallejo (819).
3- Arena Oscura. Vallejo (847).
4- Arena Clara. Vallejo (837).
Por último, distribuí algunos pequeños matojos y plantas de la marca Gamers Grass, en concreto “Dry Steppe Set”. Y pude darme el gustazo de estrenar los sets de plantas cortadas con láser, que comercializa la marca y que pillé a la vuelta de Navidades. Las referencias que he usado son: Dumb Cane y Agave. No me cansaré de recomendaros que os animéis a probar los productos de esta marca, no son baratos, pero la relación calidad precio, no tiene rival.
El resultado final, con la peana terminada, ha cumplido mis expectativas, lograr que parezca realmente un rifeño moviéndose entre las vaguadas, evitando que le detecten, antes de que se descubra la celada que tienden sus compañeros.
Estoy deseando poder cerrar el proyecto de los Goblins Nocturnos y dedicarle atención a estos blister de caballería rifeña. Sobre todo, porque han anunciado que en las próximas semanas, anunciarán la salida de un pack, con la caballería española, en concreto, el regimiento
Alcántara, unas minis que van a lucir espectaculares y que tengo muchas ganas de hacerme con ellas. Tengo grandes esperanzas, medidas en horas de disfrute pintándolas, desde que vi los magníficos cuadros de Ferrer Dalmau que dedicó a este gran regimiento. Si no conocéis su obra, os invito a que os paséis por sus redes sociales, para conocerla. Ahí os dejo una pequeña pincelada, para poneros los dientes largos:
Espero que hayáis disfrutado con esta entrada, que se sale un tanto de la tónica general del blog.
Buena caza y largas lunas.
