¿Se habrán cumplido los objetivos de 2021?

 Ya hemos llegado a final de año y toca echar la vista atrás, para ver si los buenos propósitos que hicimos a comienzos de 2021, se han cumplido o no.

La triste realidad, es que este año no he cumplido ninguno de los objetivos que me había marcado. Vamos a ir a lo sencillo, comenté que quería pintar una banda Cawdor para Necromunda, fracaso absoluto, ya que no he tocado ninguna miniatura de esa banda. Por contra, pinté unos pocos Cultistas Genestelares más, con armas especiales, para mis partidas de Necromunda con Keyan. Además, pinté los "especialistas de la Casa Orlock", dos Maestros de Armas y 4 Saltacúpulas.

Respecto a mi intención de empezar a pintar Titánicus, he de reconocer que a lo largo de 2021, no estuve en ningún momento cerca de empezar a cumplir ese proyecto. Lo dejé como un "extra" por si iba sobrado a final de año, pero no ha sido posible.

Otro de mis proyectos, era comenzar a pintar mi ejército Kharadron a lo largo de este año, pero como sabéis a estas alturas, mi proyecto Horda Goblin atravesó un bache bastante profundo. No estaba motivado para terminar de pintarlo y no quise empezar un nuevo ejército sin antes terminar el que ya tengo en la mesa de trabajo. Por tanto, los Kharadron, se han visto pospuestos, sin fecha.

 

                            

Y por último, el gran objetivo para este año, era terminar de pintar la gigantesca horda Goblin. Desde luego, aunque he avanzado con él, sobre todo en el primer semestre de 2021, el parón de pintura del verano me pesó mucho en el ánimo y me costó muchísimo retomar los pinceles con los Goblins. Lo hice de manera irregular, poniéndome de tanto en tanto, dejando pasar varios días entre sesión y sesión de pintura y finalmente decidí darme un tiempo y recuperar las ganas de volver a retomar los pinceles.

Siendo sinceros, llevo casi tres años con un gran volumen de pintura, al menos para lo que solía ser mi media. Muchas noches de pintura, robándole horas al sueño, a leer, o dedicarme a ver una serie tranquilamente, sin mirar de reojo la tele, mientras estoy con el pincel en la mano. Todo por el objetivo autoimpuesto de poder tener una entrada semanal en el Blog. Por ese motivo, he decidio que este año, en vez de hacer una entrada semanal, las haré quincenales. Así podré tomármelo con un poco más de calma y quitarme esa presión de presentar una nueva entrada semanal.

Desde luego el Blog no lo voy a dejar abandonado, mi porpósito es firme, continúa sirviendo de acicate para seguir trabajando y mostrando lo que hago. Sólo cambio la periodicidad de las entradas. 

A pesar de todo, este año, he logrado pintar un buen puñado de miniaturas:

10 Cultistas Genestelares.

6 Orlocks.

40 miniaturas para jugar a Congo.

120 miniaturas de la Horda Goblin.

Así que al final he logrado sumar 175 miniaturas pintadas a un nivel aceptable para mí. Buscando como siempre un Tabletop agradable a la vista.

Ahora toca fijarse los objetivos para el año que entra, en orden de prioridades:

1 - Lo primero de todo, terminar de una vez por todas mi Horda Goblin. ¿Qué me queda?:

- 30 jinetes de garrapatos.

- 12 Trolls.

- Hechizos permanentes.

- Goobapalosa.

- 40 Goblins, (20 lanceros, 20 arqueros).

2 - Preparar una banda Cawdor para Necromunda.

3 - Pintar una nueva columna para Congo. Se trata de un juego al que le tenía muchas ganas y sinceramente, en la última parte de 2021, pintar una Columna de Hombre Blanco para ese juego, me generó mucha satisfación. La minis de Foundry son fáciles de pintar, no están recargadas de cientos de detalles y con un poco de ganas y maña, quedan muy resultonas. Mi intención es preparar una segunda columna, posiblemente de Reinos africanos o Tribus del Bosque.

4- Me apetece muchísimo poder pintar Cursed City y tener el juego disponible para jugar con mis hijos, así que quiero buscarle un hueco durante el año a ese proyecto. Sobre todo, después del anuncio de Games Workshop que van a reeditar el juego y lanzar nuevas expansiones.

                       

Si pudiera cumplir con esos tres primeros objetivos, ya podría considerar que habría sido un buen año. A pesar de todo, no quiero dejar de señalar como posibilidad, que me vea con fuerzas y ganas de empezar un nuevo ejército de AoS. Desde luego, soy consciente de que no lo terminaría a lo largo del mismo, pero sí darle un empujón, para tener una base de inicio, para poder jugar mil puntos.

                                        

No voy a decidir aún de qué ejército hablamos, ya que tengo varios donde elegir: ya tenía en casa, Nighthaunt, Kharadron y unos pocos Idoneth. A lo largo del 2021, pude hacerme con un buen puñado de Soulblight, un ejército al que le tengo muchas ganas, por la posibilidad de hacer un ejército puramente de esqueletos, tomando como referencia aquellos magníficos ejércitos de los informes de batalla de la White Dwarf, repletos de esqueletos. Por otro lado, me hice con una buena fuerza de Orcos Mandamaloz, una nueva facción, que a mí personalmente, me ha enamorado. Ya tenía una pequeña fuerza Lumineth, que se vio muy incrementada con las nuevas salidas de este año. Y por último, cuando ya daba por cerrado la adquisición de minis de este 2021, me vi sorprendido con las Battleforce navideñas de GW..., en un principio no quise meterme en nada más, pero la salida de la caja de Osiarcas, hizo que no pudiera resistirme y pillar un buen puñado de estos constructos esqueléticos, para una nueva fuerza a las órdenes de Nagash. Así que tengo donde poder elegir.

Espero que a lo largo del 2022, pueda seguir mostrandoos todos los avances y progresos en los proyectos que están por venir.

Buena caza, largas lunas y Feliz 2022.

Miniatura Amigo Invisible 2021. "¡No puedes pasar...!"

 Una vez más, con las Navidades a la vuelta de la esquina, llega el momento de enseñar la miniatura del Amigo invisible de la edición 2021. Como viene siendo habitual en los últimos años, ésta es la cuarta vez que participo en esta iniciativa tan bonita, nos juntamos un grupo de amigos y hacemos una especie de "Amigo invisible".

Los requisitos son muy sencillos, buscar una miniatura que creas que le puede gustar a la persona que te ha tocado y poner todo tu cariño y pericia en ella. No hace falta ser un virtuoso de los pinceles, simplemente echarle un poco de ganas y tener algo pintado por un buen amigo en tus vitrinas.

En esta ocasión, me tocó a Gorgoroth como amigo invisible. Como era consciente que es una persona a la que le gusta Mordheim y El Señor de los anillos, una idea comenzó a rondarme por la cabeza, recordé la vieja miniatura de Nicodemus, un mago de Mordheim que tenía un cierto aire que nos podía recordar a algún personaje literario..., coff, coff, Gandalf, coff, coff... Así que después de mucho rebuscar y revolver, pude encontrar la miniatura arrumbada en una vieja caja.

A la hora de ponerme manos a la obra, lo primero que pensé fue en cómo pintarla, para ello, lo primero que me vino a la memoria, es la ilustración de una portada El Hobbit ilustrado que editó Norma Editorial hará la friolera de 20 años en tres tomos sueltos, ilustrado por David Wenzel, una auténtica obra de arte.

Así que supe, que además del gris, el azul iba a formar una parte importante de mi paleta de colores.

Con la miniatura ya pintada, me planteé como basear la miniatura, ¿una simple base de 25 mm con adoquines?, como si anduviese por las calles de Mordheim, nahhhh, demasiado soso. ¿Tal vez una base más grande, andando entre ruinas de la ciudad maldita?, esa opción la descarté enseguida, no me veía con la soltura suficiente para que ese elemento de escenografía me quedara bien. Así que finalmente me decidí por darle un toque más Tierras ásperas, representando uno de los muchos vagabundeos de Gandalf, un encuentro fortuito con alguno de los esbirros de la Sombra a los pies de unas decrépitas ruinas.

Para representar esas ruinas, tiré de unas piezas de resina que tenía de la marca Scibor guardadas desde hace mucho.

He aquí la explicación del por qué he elegido esa miniatura y la forma de trabajarla, sólo queda, que mi amigo invisble la disfrute tanto como yo lo he hecho en su creación.

Buena caza y largas lunas.

Peña Trolls de Piedra, Saltariscos. Cómo preparar peanas montañosas.

Después de retomar el proyecto de los Goblins de Colmillo Roto, con unos cuantos Goblins Fanáticos, me apetecía pintar unos Trolls de Piedra que tenía aún en sus matrices. Aunque no tienen el carisma de las minis de metal, hay que reconocer que estos nuevos modelos, están muy bien y permiten una gran variedad de montajes y posibilidades de conversión.

En este caso, no he querido complicarme la vida demasiado y me he dedicado a montarlos con las opciones de armas que más me llamaban la atención. Mi intención era avanzar lo más rápido posible, para dejarlos listos y que me diera tiempo a prepararles también las peanas.

Respecto a la elección de la paleta de colores, tenía claro desde un principio que quería pintarlos usando tonos azulados. La culpa de mi obsesión por usar el azul en los Troggoth, la tiene Hetairoi, que pintó hace tiempo unos maravillosos Trolls de Piedra en tonos azulados y color carne.

La receta utilizada es la siguiente:

Azul:
Base: Azul Prusia (965)
Lavado: Nuln Oil
Luz 1: 6 partes de Azul Prusia (965) + 2 partes Azul Andrea (841)
Luz 2: 50% Azul Prusia (965) + 50% Azul Andrea (841)

Luz 3: 1 partes de Azul Prusia (965) + 5 partes Azul Andrea (841)

 Carne:
Base: Carne Dorada (845)
Luz 1: 50%  Carne Dorada (845) + 50% Carne Clara (928)
Tinta: Reiksland Fleshdhade.

Una vez terminado el proceso de pintura, me puse manos a la obra con las peanas. Si soy sincero, a día de hoy, la parte que más disfruto de todo el proceso de creación de una miniatura, es la parte referida a las peanas. Por irónico que parezca, había probado muchas técnicas diferentes, desde el mejunge que mezcla agua, cola y arena de playa, pintado con el archifamoso verde goblin, utilicé rodillo de Greenstuff sobre masilla o pasta Das, etc..., por no hablar de todo tipo de matojos, hierbas, arbustos, etc... . Hasta que he encontrado la receta que vengo aplicando últimamente:

Sobre la propia peana, aplico la textura de Vallejo Tierra Oscura (26.218). Con la textura aún húmeda, le añado a la peana pequeñas piedras que he recogido de jardines, bolsas de arena de gato, o pizarra hecha pequeñas lascas después de machacarla con un martillo. Aunque la textura húmeda, puede permitir que la pequeña roca, quede sujeta, prefiero ponerle siempre una gota de pegamento. Después toca dejar que seque al menos durante 24 horas, para que adquiera la consistencia adecuada. Una vez que ha secado todo, cubros las piedras con Abbadon Black, como capa base y luego doy una primea capa de Neutral Grey y dos subidas de grises, con pinceles secos de Light Grey y Sky Grey. Una vez que he terminado ese proceso, toca pegar la miniatura a la peana. Cuando la miniatura es grande, como en el caso de los Trolls, practico un taladro en los pies de las miniaturas, a continuación, pongo una gota de pegamento en el extremo de un clip de escritorio extendido y lo introduzco en el taladro realizado. Corto el clip, dejando un extremo sobresaliendo de los pies, presiono suavemente en la textura, hasta dejar marca y sobre las mismas, realizo un taladro. Por último aplico pegamento en los pies y el extremo del clip, para fijar la miniatura a la peana.

Si quiero darle volumen o representar una roca especialmente grande, utilizo trozos de corteza de pino, de los que se usan en jardinería. En este caso, comienzo pegando los trozos de corteza a la peana, cubro con una capa de pasta Das y toca dejar secar durante 24 horas. A partir de ahí, es volver a repetir los pasos anteriores, aunque teniendo en cuenta, que en estos casos, los trozos de clip, deben ser más largos, para poder llegar hasta la base de la peana.

A partir de aquí, viene la parte divertida, empezar a usar los set de Gamers Grass a discreción, hasta que terminas satisfecho con el resultado. En mi caso, mis preferidos es el "Highland Set".

Estos días estuve revisitando los Trolls clásicos de metal que pintó Hetairoi, desde entonces siento la irrefrenable necesidad de hacerme con una unidad de seis Trolls de metal para pintarlos. Así que ya he puesto a trabajar a mi buscador oficial, Tonijor, a ver si logra conseguirme unos. Pero eso no es lo más triste, lo peor, es que estoy planteándome muy seriamente, repintar los doce Troggoth que pinté en su día en tonos verdosos.

Según tecleo estas líneas, tengo las peanas de tres Dankhold Troggoth cubiertos de pasta Das y esperando a que se seque, para dar los siguientes pasos y dejar sus peanas listas.

Buena caza y largas lunas.

 

Fanáticos Goblins. Retomamos la Horda.

 Después de unas semanas de descanso sin pintar Goblins, que me autoreceté para no perder la poca cordura que me queda a estas alturas de proyecto. He decidido volver con una unidad fácil de pintar, los Goblins Fanáticos, una unidad icónica de este ejército.

Lo cierto, es que he pasado un bache notable con este proyecto, en un principio, se trataba de pintar una pequeña horda goblins, acompañado de algunos Trolls y unos pocos garrapatos. Ese proyecto debería haber estado terminado en 2020. Como fuí añadiendo miniaturas al mismo, hasta ser capaz de crear un ejército sólo con Trolls y otro con garrapatos, aprovechando las Battleforce navideñas de los últimos años, tuve que ser realista y ampliar este proyecto otro año. Por desgracia, aunque este año, le he dado un buen empujón a este proyecto, he atravesado varios momentos de travesía del desierto, que me han desanimado un poco a la hora de pintar. Hasta el veranos llevaba bastante buen ritmo y veía factible poder cumplir lo programado, pero el parón veraniego, me pesó mucho y el ritmo de pintado de los Goblins, ha caído en picado en los últimos meses de 2021. Por todo ello, decidí parar y dejar de pintar goblins, antes de verme en la tesitura de pintar sin ganas, tratando de hacerlo lo antes posible, sin importar los resultados finales y empeorando el nivel de pintado del resto del ejército. Personalmente no quiero dejar aparcado este ejército y empezar con otro de AoS, porque me conozco, en el momento que lo deje aparcado, pueden pasar varios años antes de retomarlo y me parece una pena, dejarlo así, cuando estoy tan cerca de poder dejarlo "cerrado temporalmente".

Después de esta pequeña pausa, he logrado oxigenarme un poco y retomo de nuevo el proyecto, con ganas de finalizarlo, para poder pasar a uno nuevo lo antes posible.

De momento sólo he podido hacerme con tres matrices de plástico de las nuevas. Hay que reconocer que son miniaturas dinámicas, que transmiten la locura que por trasfondo caracteriza a esta unidad. De los 15 modelos que tengo para pintar, de momento sólo he pintado 6, así que ahora mismo, sólo podría montar una unidad de 5 Fanáticos. En las próximas semanas, espero dejar el resto de miniaturas listas y así tener hasta tres unidades listas para poner en mesa. Siempre es interesante poder llevar cinco de enloquecidos goblins enganchados a una bola maciza, dispuestos a hacer papilla todo lo que se ponga por delante.

A pesar de todo, me he quedado con las ganas de conseguir alguno de los Fanáticos clásicos de metal, así que no descarto que con el tiempo, pueda añadir otra pequeña unidad de cinco miniaturas clásicas.

Espero que volváis a ver muchos goblins en las próximas entradas, ya que eso significará, que estoy cada vez más cerca de cerrar este proyecto.

Buena caza y largas lunas.

La expedición se alarga más de lo previsto y añadimos porteadores a la columna.

 Después de pintar los maravillosos porteadores que Toni me cedió hace unas semanas, rebuscando en la montaña de plomo, encontré unas miniaturas, que sin llegar a ser porteadores propiamente dichos, pueden servir como un añadido para las columnas de porteadores.

Realmente a nivel juego, no necesitaría más de tres, ya que es el límite de porteadores que puedo meter según listas en las Columnas de Hombre Blanco. Ahora bien, desde luego a efectos estéticos, para dar un poco de color a las partidas, a la hora de preparar algún escenario especial, etc..., me parecía interesante aprovechar esas miniaturas para algo.

El objetivo que me marqué mientras pintaba estas miniaturas, era tratar de introducir notas de color, sin caer en el ridículo, que al verlas juntas, se viera variedad en las faldas que visten, que pudieran servir de contrapunto al color de piel de los porteadores, para que destaquen en mesa.

Aquí, además del porteador que aparece a la izquierda, en el centro y a la derecha, se pueden ver dos miniaturas, que se usan como personaje especial en la lista de Hombre de Blanco, el Kirangozi, una especie de jefe de columna, encargado de organizar las tropas nativas y los porteadores.

Mientras pintaba estas miniaturas, no podía dejar de repetir en mi cabeza el soniquete de los tambores de Jumanji, cada vez que estaba a punto de desatarse un desastre. Tan sólo faltaba escuchar el repiqueteo de dados, para terminar de liarla. Reconocer que las minis de los dos tambores, dentro de su simpleza, he disfrutado muchísimo pintándolas y el resultado final, me ha gustado mucho. La falda del niño llevando el rifle, tiene un acabado que me gusta mucho, a pesar de tener un color neutro, el toque de color del vuelo, le da un contrapunto que precisamente es lo que andaba buscando. Que destacase, pero sin caer en el absurdo.

 

 

Espero que os hay gustado, yo deseando ponerlas encima de una mesa y poder lucirlas todas juntas.

 

Buena caza y largas lunas.